Hoy, día 12 de agosto, aprovechando que nuestro enólogo se ha paseado entre los viñedos, le hemos hecho una serie de preguntas técnicas:
- ¿Previsión Vendimia de este año?
Este año se prevé un añada muy buena. Si la uva está sana, y si se han controlado adecuadamente el oidio, puede ser un vendimia muy interesante. Las maduraciones de la uva están siendo muy uniformes, las variedades tempranas ya tienen una buena concentración de azúcares y al mismo tiempo, mantienen un buen nivel de acidez, esto es muy importante para hacer vinos de calidad.
- ¿La climatología de este invierno puede afectar la cosecha?
Este invierno hizo frío y llovió mucho y bien, eso ha hecho que la planta haya tenido bastante agua para desarrollarse durante el período vegetativo de crecimiento. Sin embargo la uva se ha hinchado y con consecuencia de la lluvia hay mucha vegetación, importante para que la planta haga una buena fotosíntesis a la vez de madurar la uva. Las lluvias de la primavera han ido muy bien para soportar el período de sequía del verano, recordemos que hace 2 meses que no llueve, en nuestra zona, y los viñedos de momento no sufren estrés hídrico. Por otro lado, el agua caída ha dado más trabajo de campo, en nuestro caso que no utilizamos herbicidas, hemos tenido más trabajo con el control de malas hierbas.
- ¿Qué variedad se vendimiará antes?
Ya llevamos algunos controles de maduración, de momento todavía es pronto para determinar el día exacto de la cosecha, pero las previsiones van por el día 18 o 19 de agosto. Empezamos por alguna finca de chardonnay y Pinot Noir, estas variedades irán destinadas para la elaboración de vinos base cava.
- ¿El aumento de la temperatura puede afectar la producción de vino?
Seguramente un incremento notable de las temperaturas afectará y está afectando en la producción del vino. De entrada hay una tendencia a cosechar más temprano, pero donde puede afectar más es en la maduración de la uva, ya que con el calor, hay un incremento de azúcar y una ligera bajada de acidez. Probablemente tendrá que ir adaptando el viñedo en las condiciones con diferentes técnicas de cultivo, a la vez de podar o labrar el viñedo, y posiblemente pensar con soportes de riego en momentos puntuales en un futuro
